viernes, 14 de octubre de 2016

Alumnos valencianos con desventaja en la reválida

Profesores de Filosofía alertan de que los alumnos valencianos irán a la reválida en desventaja.

 «Los alumnos de segundo de Bachillerato de la Comunitat Valenciana van a estar en desventaja en el acceso a la universidad con respecto a otros estudiantes de España al no haber tomado medidas la Conselleria de Educación para paliar el error total cometido con la Filosofía por la Lomce», alerta desde la Red Española de Filosofía (REF), el profesor Ángel Vallejo, miembro también de la Societat de Filosofia del País Valencià (SFPV). Todos los estudiantes de la primera promoción valenciana del Bachillerato de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) afrontarán en junio una reválida de 9 exámenes entre los que se incluye la Filosofía a pesar de que esta asignatura tras la reforma educativa impuesta por el PP sólo se imparte en primero. Aunque al ser la primera reválida no se exigirá aprobarla para obtener el título de Bachillerato, su nota si que se tendrá en cuenta para acceder a la universidad al no existir la selectividad.
Ante esta problemática, el tener que examinarse de una materia un año después de haberla cursado, según Vallejo, «todas las autonomías no gobernadas por el PP salvo la Comunitat han optado por convertir en obligatoria la asignatura de Historia de la Filosofía en segundo de Bachillerato».
La Conselleria de Educación, pese a su rechazo frontal a la Lomce, ha mantenido las directrices del ministerio de ofertar la Historia de la Filosofía como materia optativa y únicamente a los alumnos del Bachillerato de Humanidades y Ciencias Sociales, dejando sin ninguna opción al alumnado de las modalidades de Ciencias y Artes.

Vallejo asegura que desde la REF y la SFPV llevan advirtiendo «desde incluso antes de las elecciones de 2015 a la Conselleria de Educación del grave problema que iban a tener los alumnos de Bachillerato en la reválida con la Filosofía». Cita hasta cinco reuniones sin éxito: una primera con Beatriz Gascó, cuando la ahora diputada del PP en la oposición aún era directora general de Ordenación Educativa de la conselleria; tres con el actual director general de Política Educativa, Jaume Fullana, y una última el pasado julio con el secretario autonómico de Educación, Miquel Soler.
«En todas ellas les trasmitimos nuestra preocupación por el maltrato de la Lomce a la Filosofía y el problema que iba a generar en la reválida de Bachillerato al no haber continuidad de la asignatura entre primero y segundo», destaca el directivo de la REF, que es docente de Filosofía en Secundaria. «Nuestra reivindicación nunca ha sido laboral, pese a que se han perdido la mitad de horas de Filosofía en Bachillerato, sino una lucha por el alumnado», sostiene.
Para Vallejo el rechazo del departamento del conseller Vicent Marzà a modificar el currículo de segundo de Bachillerato «hará que el alumnado valenciano esté en desventaja de cara al acceso a la universidad si tiene que competir por una plaza con el de otras autonomías donde si que se han tomado medidas y sus estudiantes irán mejor preparados».
«Ha sido un error total de la Administración, pues ahora ya no hay solución ya que el profesorado de Filosofía no tiene horario para atender a los alumnos», critica Vallejo. Además del dislate que supone examinarse de una asignatura cursada hace un año, el profesor alerta de que los alumnos no tienen ninguna pauta para preparar el examen: «¿Qué íbamos a preparar hace un año si aún ahora no se sabe cómo será la prueba?»

martes, 11 de octubre de 2016

Últimas noticias sobre la LOMCE

Todas las autonomías abogan por que el Gobierno mantenga la Selectividad.

Las 17 regiones, incluidas las cinco del PP, quieren que el Ministerio de Educación aparque la reválida de Bachillerato al menos durante este curso.

 Las 17 comunidades autónomas, incluidas las cinco del PP, son partidarias de que el Ministerio de Educación aparque al menos un año la reválida de Bachillerato .Con el curso ya empezado y con un Ejecutivo en funciones, ven más útil mantener la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU). También le piden al ministerio que establezca mecanismos legales para garantizar que se respeta el distrito único.

 Los directores generales de Universidades, dependientes de las comunidades autónomas, están elaborando una carta para el Ministerio de Educación con esta petición, a cuyo borrador ha tenido acceso EL PAÍS. Se reunieron el pasado martes en Valladolid ante la incertidumbre de la reválida de Bachillerato que sustituye a la Selectividad y que este curso deben hacer los alumnos de segundo curso. En el escrito piden la prórroga de al menos un curso académico. Recuerdan que, en este primer curso, la ley educativa da un carácter transitorio a este examen, que no tendrá efectos académicos ni sirve todavía para obtener el título de Bachillerato.


Los directores generales, que están por debajo de consejeros y viceconsejeros de Educación, quieren que su decisión se interprete como una cuestión técnica y quede al margen del conflicto político y de las valoraciones sobre la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE). Es la primera vez que todas rechazan una medida de la reforma educativa del PP aunque puede que no todas reciban el respaldo de sus consejeros, según una fuente conocedora de la negociación.
Los altos cargos regionales acordaron además en su reunión mantener el distrito único, es decir, que la nota del examen de cualquier alumno sirva en todo el territorio español independientemente de dónde lo realice. Consideran que de este modo se evitará “la duplicidad de pruebas” que permite la actual normativa. La Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) da la opción a cada Universidad de hacer su propio proceso de selección.



El Congreso respalda retirar las reválidas educativas

Es la segunda vez que una iniciativa contra la LOMCE sale adelante en la Cámara Baja.

El pleno del Congreso ha aprobado por 175 votos a favor, 133 en contra y 34 abstenciones retirar el decreto que regula las reválidas educativas, aprobado el pasado julio.   La propuesta era una de las iniciativas registradas este martes una iniciativa por la antigua Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), en la que pide la derogación de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) y del real decreto que regula las reválidas de ESO (14 y 15 años) y de Bachillerato (17 y 18).

Francesc Homs, portavoz en el Congreso de la formación catalana, registró en septiembre la proposición no de ley en la Cámara Baja, declarando ante los medios la necesidad de "cargarse la LOMCE de una puñetera vez", según declaraciones recogidas por Europa Press. "Si en el primer Pleno que tenemos ordinario en esta casa no somos capaces de dar un mensaje contundente a la sociedad sobre la LOMCE, los responsables seremos los demás de que las políticas del PP persistan", declaró.
"Presentamos esta iniciativa desde Cataluña para defender las competencias de las autonomías", añade Miriam Nogueras, diputada y secretaria segunda de la Comisión de Educación de la formación, ahora rebautizada como Partit Demòcrata Català (PDC). "Rechazamos que esos exámenes, con efecto punitivo, sean los que determinen qué alumnos tienen el título", añade la diputada. "La LOMCE no es para mejorar la calidad de la educación, lo que se mejora con estas pruebas es la recentralización política".
Los diputados de Ciudadanos se han abstenido tras presentar una modificación que no ha sido aceptada. El partido de Albert Rivera, como ya había defendido previamente, no comparte la paralización de la LOMCE. Pero sí está de acuerdo con que quede en suspenso "de forma inmediata" el decreto que regula las reválidas finales de ESO y Bachillerato, según el texto alternativo que habían presentado.
Sus declaraciones públicas no han sido tan contundentes en el caso de la prueba de final de la ESO.  Su partido incluyó la revisión de esta prueba entre las medidas de acuerdo con Ciudadanos y Coalición Canaria para intentar formar gobierno en la última votación fallida de Mariano Rajoy. 
 
 
 

Un adolescente de 14 años planta cara a las reválidas de Wert

El estudiante Isidoro Martínez ha conseguido 240.000 firmas contra las polémicas evaluaciones externas de la LOMCE.

 En su instituto aún no dan crédito al ver a este estudiante, que aún no ha empezado 3º de ESO, en todas las televisiones liderando una cruzada contra un decreto del Gobierno.

Estas reválidas forman parte de la LOMCE, la gran reforma educativa impulsada por el exministro José Ignacio Wert y que salió adelante únicamente con los votos del PP. Son tres evaluaciones externas que se dan en las tres etapas formativa: una en sexto de primaria (que lleva un curso en marcha) y las dos que se inician este curso: la de 4º de ESO (que se inicia este curso como piloto) y la de bachillerato (que sustituirá a la selectividad). Suspenderlas, aunque se hayan aprobado todos los cursos, implica no seguir avanzando en el proceso educativo. Según ha informado Pilar Álvarez en este diario, las reválidas, que solo se dan en la ESO en 5 países de la UE, tienen una amplia oposición. 4 de cada 5 profesores están en contra (el 87,6% considera que no mejora la educación en España), los directores de instituto la rechazan (por “dejar en el limbo” a los estudiantes que aprueban el curso y no la reválida), 12 comunidades autónomas han pedido su paralización (recibiendo también críticas por parte de algún gobierno autonómico del PP) y el Consejo de Estado ha criticado la cocción de la norma por no contar con la suficiente participación de los afectados. El PP ha acabado ofreciendo las reválidas como un punto negociable para pactar con Ciudadanos y Coalición Canarias la continuidad del Gobierno de Mariano Rajoy.

Con la certeza de que no tienen nada que perder, los tres adolescentes se montaron este martes por la noche en un autobús nocturno que los llevó desde tierras gaditanas a Madrid. A primera hora fueron a las oficinas de Change.org, no sin pasar antes por un Starbucks (“ya aprovechamos para desayunar en un sitio que no existe en San Fernando”, propuso Martínez), y cargaron hasta el Ministerio de Educación las cajas que simbolizan las 240.000 firmas que les respaldan. Íñigo Méndez de Vigo, relevo de Wert en la institución, los ha recibido pero se ha negado a retirar el decreto. Saben que lo que han conseguido no es poco, aunque insuficiente, así que seguirán recogiendo firmas para seguir la protesta contra este decreto que consideran impropio. Tras este periplo de ocho horas en la capital, vuelven a San Fernando, que este jueves es su primer día en 3º de la ESO. No piensan faltar. Quién sabe si lo enseñado el primer día de clase entrará en la reválida que por el momento tendrán que hacer en junio de 2018.

 

viernes, 7 de octubre de 2016

Reválidas Comunidad Valenciana

Las 'reválidas' de ESO y Bachillerato de la Lomce ya tienen luz verde para el próximo curso.

 El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes 29 de julio el decreto por el que se regulan las evaluaciones finales de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y de Bachillerato de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce), que se aplicarán el próximo curso 2016-2017. Ambas serán obligatorias para obtener el título de la etapa y la de Bachillerato servirá también para acceder a la Universidad.

"De esta manera se garantiza la seguridad jurídica y la igualdad de oportunidades en todo el territorio nacional de los estudiantes que a partir del año que viene se examinen de los nuevos currículums establecidos en la Lomce", ha afirmado la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, donde ha defendido que "en la mayoría de los países de la OCDE y la Unión Europea existen pruebas estandarizadas al final de las etapas educativas".
La evaluación de ESO (alumnos de 15 y 16 años) se pondrá en marcha en 2017, pero no será hasta 2018 cuando los alumnos tengan que aprobarla para obtener el título de la ESO. Lo mismo ocurre con la de Bachillerato (17 y 18 años), que en el primer año de aplicación, 2017, no servirá para titular, pero sí para acceder a la Universidad.

Cambios respecto al planteamiento de Wert.

El Gobierno mantiene casi en su totalidad el texto del último borrador del decreto, dado a conocer el pasado mes de mayo, salvo "alguna cuestión técnica", a propuesta del Consejo de Estado, según han indicado fuentes del Ministerio de Educación.
A diferencia de lo que planteó el equipo del exministro José Ignacio Wert, las pruebas finalmente no van a ser tipo test, la evaluación de Bachillerato será muy similar a la Selectividad, no habrá un único examen el mismo día para todos los alumnos de todas las autonomías y no se publicarán los resultados para evitar ránkings de centros docentes.

La prueba de Bachillerato se ha consensuado con los rectores que pedían que no se rompiera el llamado 'distrito único', es decir, que, tras aprobarla, los alumnos podrán acceder, como hasta ahora, a cualquiera de las universidades españolas sin tener que someterse a procesos de selección en cada campus. No obstante, esta última opción queda abierta porque la Lomce lo permite.
Las comunidades autónomas tendrán la potestad para organizar las evaluaciones y fijar los tribunales, las fechas y las preguntas de los exámenes, una decisión, esta última, que fue criticada por el Consejo Escolar del Estado, que advirtió de que "podría ahondar, aún más, en las diferencias existentes entre las 17 autonomías". El ministerio, por su parte, fijará el marco común de las pruebas, es decir, las características, el diseño de las pruebas y su contenido.

Características de las pruebas
En cuanto a las características de las pruebas, desde el Ministerio de Educación aseguran que se mantienen respecto al último borrador. Así, la duración de las evaluaciones finales de ESO y Bachillerato será de cuatro días, aunque las comunidades autónomas con lengua cooficial podrán establecer una duración máxima de cinco. Las preguntas de cada examen en ambos casos no podrán superar los 15 ítems y no serán tipo test, sino abiertas y semiabiertas.
Los alumnos de 4º de la ESO se examinarán de siete materias: cuatro troncales, dos opcionales y una específica, a elección del alumno, que no sea Educación Física, Religión o Valores. La nota final constará en un 70% de la media de las calificaciones obtenidas en esa etapa y en un 30% la calificación en la evaluación final.
Los de 2º de Bachillerato se examinarán de cinco asignaturas troncales, dos opcionales y una específica, a elección del alumno, que no sea Educación Física ni Religión. La nota final en este caso se ponderará como se había hecho hasta ahora: en un 60% la media de las calificaciones obtenidas en Bachillerato y en un 40% la calificación de la 'reválida'.
Sobre la publicación de los resultados, una cuestión muy criticada por la comunidad educativa ante el temor de que las comunidades pudieran elaborar ránkings de centros docentes, el Gobierno se ha compromete finalmente a comunicarlos directamente a cada colegio e instituto para que "en ningún caso" se hagan tales clasificaciones.

Reválidas Comunidad Valenciana

-Lomce características. 

1-. RELIGIÓN Y SU ALTERNATIVA
Los alumnos podrán cursar simultáneamente religión confesional y una alternativa de formación en valores en primaria y ESO, que se llamará, según la etapa, Valores Sociales o Culturales o Valores Éticos. Desaparece, por tanto, Educación para la Ciudadanía, creada en la reforma de 2006.

 2-. MODELOS LINGÜÍSTICOS
 La lengua castellana y primera lengua extranjera se considerarán troncales, pero no las lenguas autonómicas cooficiales, que serán materia de especialidad, aunque de estudio obligatorio. Se elimina, por tanto, la inmersión lingüística, que llevaba 30 años en marcha en algunas comunidades con lengua cooficial. Se establece un mínimo de asignaturas en las dos lenguas oficiales.

 3-. SEGREGACIÓN POR SEXO
La ley elimina la prohibición de subvencionar a los colegios privados que discriminan a sus alumnos por razón de sexo y las administraciones podrán concertar financiación de centros que eduquen separadamente por sexos, siempre que no exista discriminación entre el alumnado. En concreto, la ley dice: "No constituye discriminación la admisión de alumnos o la organización de la enseñanza diferenciada por sexos, siempre que la enseñanza que impartan se desarrolle conforme a lo dispuesto (...) por la Unesco (...).

 4-. EVALUACIONES Y RÁNKING
 Entre las principales novedades que incluye el anteproyecto de ley se encuentra la implantación de evaluaciones que diseñará el Ministerio de Educación a nivel estatal al final de Primaria, ESO y Bachillerato, además de una prueba en 3º de Primaria para la detección precoz de problemas de aprendizaje en los alumnos. Los exámenes de ESO y Bachillerato serán necesarios para obtener el título y el segundo, que los sectores críticos llaman "reválida", sustituirá a la actual Selectividad.

 5-. BACHILLERATO
 En bachillerato, solo se podrá repetir una vez por curso y excepcionalmente dos veces un mismo curso. Se pasará de un curso a otro con hasta dos suspensos, de los que los estudiantes deberán matricularse nuevamente. El bachillerato tendrá las modalidades de ciencias, humanidades, ciencias sociales y artes, según decidan comunidades y centros. Habrá que superar una evaluación final para obtener el título de bachiller, que versará sobre troncales y específicas. El título facultará para acceder a la educación superior, aunque las universidades pueden valorar además formación complementaria y pruebas específicas.

 6-. MAYOR AUTORIDAD DE LOS DIRECTORES Y MÁS ALUMNOS
  Los directores de los centros públicos ganan importancia: Deberán acreditar cinco años de docencia y un curso específico de formación. Podrán fijar requisitos y méritos para los puestos de funcionarios docentes y de interinos. Las comunidades podrán "excepcionalmente" incorporar "expertos" (no precisa si serán nativos) como profesores bilingües o plurilingües con la formación y titulación requerida en cada caso. Además, los docentes se enfrentarán a otro problema: el aumento del ratio de alumnos por clase que se ampliará un 10%.

7-. NUEVA FORMACIÓN PROFESIONAL 
  La nueva ley crea una FP llamada "básica", que consta de dos cursos y se destina a alumnos de entre 15 y 17 años de segundo o tercero de ESO con dificultades de progreso. Es gratuita, parte de la enseñanza obligatoria y permitirá adquirir la cualificación profesional mínima y optar al título de ESO. El Gobierno regulará las convalidaciones y equivalencias entre FP media y superior y el resto de enseñanzas.

8-. MÁS CONTROL DEL MINISTERIO
El Gobierno central fijará los contenidos de las materias troncales de primaria, secundaria y bachiller (por ejemplo, Biología y Geología; Física y Química, Geografía e Historia; Lengua; Matemáticas; Idioma extranjero). Para casi todas las demás, las "específicas" (Educación física, Plástica, Música, entre otras), fijará objetivos y criterios de evaluación; las autonomías fijarán el temario concreto en este caso. Las autonomías perderán, por tanto, capacidad de decisión sobre los contenidos educativos, ya que la reforma educativa aumenta la capacidad del Gobierno central para fijar hasta el 65% de los contenidos de las enseñanzas mínimas para las comunidades con lengua cooficial y el 75% para el resto.